....Para el final de la temporada, ¿sólo?, ¿para el final del club?, ¿para el final de una parte de nuestra vida?...
Siempre he asumido que mi club no puede competir por ligas, y tengo claro, y no espero cada domingo, que la muevan tan rápido como el Barça de Guardiola… pero cuando me siento a ver a mi Unión, y ayer estuve en el Carlos Belmonte, espero simplemente que me representen, a veces con ausencia de calidad, la presencia del compromiso me basta, pido poco… sólo que la profesionalidad de representar un escudo casi centenario, haga que uno salga del estadio por lo menos orgulloso de decir… esos once son los míos… pero ayer no pasó nada de eso…
Desde el minuto quince de la primera parte hasta el final, no me vi representado en ninguno de los jugadores.
Sí, catorce señores llevaron la camiseta roja del escudo del puente y el toro, pero no vi alma bajo esa tela con mangas…las únicas camisetas que se lucieron con orgullo fueron la treintena que vistieron los desplazados…
Sí, catorce señores llevaron la camiseta roja del escudo del puente y el toro, pero no vi alma bajo esa tela con mangas…las únicas camisetas que se lucieron con orgullo fueron la treintena que vistieron los desplazados…
Esto se acaba señores, y el año que viene puede que no haya más, y parece que los jugadores y entrenador que nos representan aún no se han enterado…lamentablemente, ellos se irán y nos quedaremos nosotros…con o sin club, los mismos de siempre…
Llevo viendo a la Unión casi 30 años y pocas veces vi tan poca alma como ayer en un terreno de juego bajo ese escudo, en un partido tan importante…
Preocupado como estoy, pierden importancia las historias pendientes de este blog, hablar de Neme, de Rezza, de la lesión de D’Alessandro, del gol de Eizmendi, de la primera promoción a primera, del Calvario, del gol de Pauleta en el Vivero…muchas, aún en mis armarios…
No tiene sentido hablar de historia, en esta situación tan crítica, si estas historias dentro de unos días pueden ser parte de un club que sólo tenga eso, historia, porque no exista presente nunca más…
Queda ese tiempo que preside el post, o menos, para reaccionar, para que mi camiseta, esa que vistieron tantos durante 88 años, por lo menos recupere un alma que tuvo, que yo la vi, muchas tardes…y que se la han quitado…
Foto editada de original de Barroso-La Gaceta